Salchicha City

Érase una vez yo, siendo niño, que cruzando un paso de peatones mi pie tocó el bordillo y caí de boca sobre un banco de piedra. Fue tal el golpe que se me partió una esquina de la paleta derecha.
Hoy, unos 15 años después, en otro país, y sin querer, ese trozo ha vuelto, en forma de empaste. Quíen me iba a decir a mi que esto iba a suceder de esta forma.

Voy al dentista. El tío me dice que si quiero repararme el diente, que son 40 euros. Le digo que de momento no y me dice que como le molesta más a él que a mí, que va a hacermelo gratis. Ahí está, mi diente otra vez entero sin quererlo, como se fue, vino.
Esta experiencia me ha hecho valorar las cosas importantes en la vida.

Y bueno, ahora con mi boca como nueva, iré mañana a visitar otra casita, a ver si no me sale rana.
En breve, noticias.