Tetas y ratones

Alemania es un poco extraña.

Hoy, en la piscina, había una mujer con un gran y vistoso par de tetas, aderezadas por un bikini color rosa cartulina fluorescente. Cuando dicha mujer sale de la piscina, miro al otro chico que había allí y con los ojos le hago un "dios santo que pedazo de tetas", a lo que el tipo se ríe y me dice algo. Me acerco, le digo que lo siento pero que no hablo alemán, y el tío comienza a hablarme en inglés y a interesarse por mi vida. Un tío en una piscina preguntándole a otro que no conoce de nada sobre su vida. Bastante raro. Pero merecieron la pena.

Luego, en el metro, me senté a esperar la U1, U2, U3, dirección norte, hacia mi casa. y me pongo al lado de la máquina de chocolatinas en la cual sé que vive un ratón. Una mujer, que se comía un chocolate tira un trozo al suelo y el ratón sale, y se lo lleva. A mi se me escapa una sonrisa y me dice la mujer "parece un canguro". Y luego le tiró otro trozo.

¡Tetas!

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